Texto de la clase:
Ciro
Cardoso y Héctor Perez Brignoli: Historia Económica de América Latina. Tomo II. Economías de exportación y desarrollo capitalista. Barcelona. Editorial Crítica. 1984. Capítulo 4, La transición al capitalismo
periférico.
Encuadre del material propuesto
«La única ambición de este libro es la de ser
un instrumento de ayuda en la construcción de hipótesis, en la definición de problemas
y prioridades de investigación». Se advierte, asimismo, que los problemas de la
historia agraria constituyen, en definitiva, el eje en la reconstrucción
histórica que se ensaya. Se entiende, por otra parte, que sólo partiendo de esa
perspectiva se pueden sortear escollos como el que significa asimilar: «la historia latinoamericana a
variantes, sin mayor interés, de las etapas o procesos ya dados en la historia
europea» y aquel otro que acentúa las relaciones de dependencia y “caracterizan
la dinámica del cambio social y económico en Latinoamérica como un mero
reflejo de la de los países más avanzados”[1].
Actividad de la clase: Leer las
siguientes nociones presentes en el capítulo y elaborar un punteo con los
argumentos y datos proporcionados por los autores para sustentar las mismas. Luego se realizaremos una puesta en común.
- La evolución del mundo colonial hispanoamericano al capitalismo periférico debe buscarse en elementos exógenos.
- La evolución al capitalismo periférico se profundiza luego de la segunda mitad del siglo XIX, presentando tres cambios fundamentales.
- Las causas de la abolición de la esclavitud no deben buscarse en casos puntuales o en los debates parlamentarios británicos.
- La abolición de la esclavitud en cualquiera de sus formas (desde arriba, desde abajo o combinada) no generó formas tradicionales del trabajo asalariado.
- Las reformas liberales no muestran un patrón general. Sin embargo la tenencia de la tierra fue un problema fundamental a resolver, ya que la misma será fuente de financiamiento y generadora del mercado de trabajo.
- La expansión de la frontera agrícola fue desigual. Esta se encontró determinada por tres variables: las condiciones de acceso, las características del poblamiento (europeo o interno) y la capacidad de penetración del capital extranjero.
- La ocupación extranjera y las economías de enclave en regiones de América central y el Caribe, propiciaron la incorporación tardía al mercado mundial.
- Es necesario complementar el modelo marxista de acumulación originaria inglesa acentuando el foco en la estructura y la dinámica de las clases dentro de las sociedades latinoamericanas. Las visiones circulacionistas no contribuyen en este sentido.
[1] Nelson MARTÍNEZ DÍAZ. "América Latina:
nuevos enfoques", in Tiempo de historia (Salamanca), Año VI, nº 66, 1980,
pp. 125-126
No hay comentarios:
Publicar un comentario